Según la agencia estatal de noticias Xinhua, citando al portavoz de la Comisión de Planificación de Familia y Salud, Mao Qun’an, “China podría permitir tener un segundo hijo a las familias en las que uno de los padres es hijo único”.
Ya en algunas zonas urbanas se puede tener un segundo hijo si ambos padres son hijos únicos y para ciertos grupos étnicos pequeños las normas no son tan estrictas.
Para Mao Qun’an el objetivo de la propuesta es “mejorar la política familiar manteniendo la actual tasa de natalidad baja, pero teniendo en cuenta las necesidades de la población, el desarrollo social y económico y los cambios en la estructura de la población china”.
La medida -que se toma por el envejecimiento de la población que amenaza la competitividad de China- podría introducirse a principios del año que viene. Expertos consultados por la publicación no tienen una opinión unánime sobre si la reforma provocará un aumento de la natalidad.
Fue en 1979 que se introdujo la ‘política del hijo único’ para reducir el excesivo crecimiento de la población. Sin embargo, desencadenó en cientos de millones de abortos y esterilizaciones, a menudo mal ejecutadas en las regiones pobres.
China tiene 1,34 billones de habitantes y su Gobierno -según indica ACB de España- a principios de este año había negado los rumores sobre un cambio en esta política “insistiendo en la necesidad de mantener la tasa de natalidad baja”.