Los coroneles Vivas y Arévalo, que fueron enviados por el despacho judicial a la cárcel La Picota, son investigados por falsedad en documento, fraude procesal, porte ilegal de armas y favorecimiento de homicidio.
“Si ayudaron a un uniformado de la institución, también realizarÃan acciones con las que se beneficiarÃan de forma personal”, indicó la juez.
En octubre de 2012 se capturaron 5 personas involucradas en el homicidio del grafitero. Entre esos están el subteniente Résemberg Madrid, comandante del CAI Andes el dÃa de los hechos; el patrullero Nelson RodrÃguez; el subintendente Juan Leal, quien primero respondió al caso; Héctor Hernando Ruiz EchavarrÃa, abogado defensor del patrullero procesado WÃlmer Alarcón, y Jorge Eliécer Narváez, conductor de la buseta que denunció un hurto el dÃa de los hechos.
El 19 de agosto de 2011, Diego Felipe Becerra Lizarazo, de 16 años de edad, fue asesinado de un balazo mientras pintaba un grafiti en la avenida Boyacá con 116, en el sector de Suba. En el hecho, que aún es del resorte de la justicia, intervinieron agentes de la PolicÃa Metropolitana de Bogotá, quienes, tras la muerte del adolescente, insinuaron que dispararon en su contra porque habÃa atracado una buseta.
