“Ser honesto es fácil, lo difícil es fingir”, afirma el argentino, que viene para el Festival Centro
Dos referencias justas: Tequila y Los Rodríguez. La primera fue la banda con la que triunfó en España a mediados de los 70 –huyo allí de la dictadura argentina– en un espacio aún incipiente para el rock en español. La segunda, que conformó con Andrés Calamaro, fue una de las sociedades más brillantes del rock latino en los 90.
Rot es una de las figuras de la próxima edición del Festival Centro, que se realizará en enero de 2014 en Bogotá. Es la primera vez que el argentino viene al país.
“A Colombia voy a ir con un espectáculo que hago solo, lo hice durante dos años en España –adelanta Rot–. Es un concierto muy personal y especial. Pero que la gente no se imagine que voy a salir con la guitarra solo a cantar mis canciones, es un ‘show’ bastante elaborado con guitarra eléctrica”.
‘La huesuda’, un retrato de la muerte, es su álbum más reciente. En él presenta, entre otros temas, una nueva versión de una de sus canciones más recordadas: ‘Debajo del puente’, que en 1984 hablaba de ese submundo que ha sido ocultado de una superficie de fantasías.
“Sin embargo, creo que mi repertorio es muy luminoso”, sostiene el roquero: “Tiene que ver con mi forma de ser, pese a que esté tocando temas delicados y tabú, siempre lo hago con un lenguaje reflexivo, observador (…) El mundo que nos rodea ya no es marginal sino que está a la vista, lamentablemente. Ya no tienes que ir debajo del puente para ver cómo se cae la estantería del sueño español”.
De crisis, Rot sabe bastante, pues conoció muy temprano la fama y luego el descalabro: “Para mi ganarme la vida con el rock siempre fue un milagro. Aprendí desde muy chiquito la lección porque triunfé muy joven, a los 17 años ya estaba en Tequila girando por España y vendiendo muchos discos y siendo No.1. Pero también en poco tiempo vi como todo eso podía no significar nada y en cuatro o cinco años habíamos quemado todos los cartuchos y nuestra vida había cambiado radicalmente”.
“Los músicos afortunadamente tenemos la música, por algo la elegimos cuando éramos chiquitos, sin imaginarnos nunca que es iba a ser nuestro modo de ganarnos la vida, era más bien nuestra manera de soportar la vida”, afirma.
De hecho, ‘La huesuda’ viene de antes de la actual situación en España: “Durante la composición, la crisis realmente no se había asentado de la manera tan brutal que hemos visto en los últimos meses, que es como que realmente se ha caído el tablero y más que una crisis, es un nuevo escenario que difícilmente vuelva a ser lo que fue”.
Cinco artistas: una prueba del amplio menú del Centro
Velandia y la Tigra
Las ‘rasqas’ de Edson Velandia, que dirige orquestas con su machete, son el patrimonio de la Colombia sicodélica. Su grupo, que se había disuelto el año pasado, volvió con una nueva descarga de demencia popular.
Dahka Brahka (Ucrania)
Este cuarteto oriundo de Kiev lleva el concepto de ‘música del mundo’ a otro nivel: es una mezcla de ritmos étnicos con sonidos contemporáneos, muy etéreos, y con una puesta en escena singular.
Chico Trujillo (Chile)
El Centro ha sido vitrina de la cumbia continental, y no podía faltar Chile. Su cumbia ‘chilombiana’ tiene elementos de reggae, funk, bolero, música latinoamericana y rock balcánico.
Martín Buscaglia (Uruguay)
Los cantautores ya no son un hombre y su guitarra. Ahora van más allá. Uno de los más destacados es este uruguayo que sorprende con discos como El evangelio según mi jardinero. Por Colombia, está Julián Mayorga.
Alci Acosta
Leyenda del bolero, es la voz de clásicos como Traicionera, La cárcel de Sing Sing, La copa rota. Otros artistas tradicionales colombianos invitados: Los Alegres de Genoy y la Orquesta de Lucho Bermúdez.
En enero, Festival Centro
Se hará los días 7, 8, 9, 10 y 11 de enero, en la Fundación Gilberto Alzate Avendaño. Según el día, los precios de las boletas oscilarán entre 15.000 y 35.000 pesos.
Informacion Eltiempo.com