El conjunto de Medellín, dirigido por Juan Carlos Osorio, levantó su tercera copa en el 2013.
El partido en Medellín acababa de terminar y en medio de la euforia, en plena cancha del Atanasio Girardot, apareció un héroe en hombros. El técnico Juan Carlos Osorio, con los brazos en alto y una sonrisa infinita, era paseado por sus pupilos del Nacional, que celebraban así, en medio del éxtasis y del atronador bullicio nacido en las tribunas, el título que acababan de conseguir sobre el Cali, tras ganarle 2-0 la final. Un título que tiene el sello del entrenador.
La fiesta antioqueña había tenido solo 16 minutos de prudencia. La final era joven, reñida y pareja. Pero fue entonces cuando el paraguayo Camacho, en una acción desafortunada, voló para desviar un cabezazo de Murillo y metió la pelota en su propio arco. No fue solo el 1-0 a favor de Nacional; fue el autogol que desbarató al Cali y del cual no se pudo reponer. Fue el comienzo de la victoria de Nacional.
Ese fulminante gol desbarató no solo las ilusiones caleñas; también la estrategia, las intenciones, el fútbol. La incipiente intensidad ofensiva del equipo de Leonel fue anecdótica: el remate de Lizarazo, de media distancia, que hizo volar a ‘Neco’ Martínez cuando iban 10 minutos; la variante de incluir al lateral derecho Víctor Giraldo por la izquierda, la idea de mandar al ataque al explosivo Vladimir Marín… Todo quedó en intentos fallidos.
Los rugidos de Faryd Mondragón bajo los tres palos no contagiaron a los suyos; las contorsiones de Leonel, tampoco. Cali entró en un letargo, como bajo la sombra de un oscuro presentimiento. La estrella se le escapaba.
Ni siquiera los 15 minutos del entretiempo le devolvieron el alma. Nacional era superior, imponente y devastador. Entonces llegó el segundo gol. El cronómetro dictaba el minuto 17 de la segunda parte. Fue un pelotazo largo de Farid Díaz que atravesó la cancha. Berrío acarició la pelota con la cabeza y se la dejó a Duque, quien dejó en el camino a su marcador Calderón, también a Mondragón, y empujó la pelota al fondo de la red, dejando también en el camino las aspiraciones vallecaucanas.
Entonces, la fiesta, que hasta ahora había sido disimulada, se prendió en el Atanasio Girardot. Estrellas con el número 13 se exhibieron en las gradas, la hinchada gritaba, cantaba y hasta bailaba. La pólvora acompañó sus coros y en la cancha Sherman y su corte también danzaban. Un Cali entregado, desordenado, vulnerable, fue inferior.
Fue cuando las miradas se posaron sobre el central Machado, inadvertido hasta entonces, pero el dueño del tiempo. Y su brazo en alto desató el éxtasis. Los jugadores corrieron a levantar a su DT, quien minutos después de ser vitoreado levantó la Copa, la segunda de este año, la que lo metió definitivamente en el corazón de la hinchada de Nacional.
Síntesis Atlético Nacional 2-0 Deportivo Cali
Atlético Nacional: Luis ‘Neco’ Martínez; Stefan Medina, Diego Peralta, Óscar Murillo; Daniel Bocanegra,John Valoy, Alejandro Bernal, Juan David Valencia; Sherman Cárdenas; Orlando Berrío, Jéfferson Duque
DT: Juan Carlos Osorio
Deportivo Cali: Faryd Mondragón; Yerson Candelo, Fabio Torijano, Luis Calderón, Vladimir Marín; John Viáfara, Andrés Pérez, Carlos Lizarazo, Víctor Giraldo, Néstor Camacho; Sergio Romero
DT: Leonel Álvarez
Cambios en Nacional: Farid Díaz por Valencia (14 ST), John Pajoy por Berrío (24 ST) y Diego Arias por Bernal (31 ST).
Cambios en Cali: Carlos Rivas por Giraldo (18 ST), Hárrison Mojica por Camacho (25 ST) y Diego Amaya por Viáfara (28 ST).
Goles de Nacional: Camacho (17 PT, autogol) y Duque (16 ST).
Informacion Eltiempo.com