Domingo, 6 de Abril del 2025 
“Mi intención es sacar el niño que lleva dentro mi generación, que no se les duerma con tantas angustias, con el día a día. Con tanto ajetreo uno se va poniendo como opaco ante las emociones, ante las sorpresas”, dijo la artista en un encuentro con un grupo de medios de comunicación.
Por ello, lo que busca la artista de 42 años es que los miembros de su generación, que ahora tienen hijos, puedan volver a ser niños y que también sus hijos se diviertan con esas mismas canciones, “que todos viajemos a ser niños de la mano”.
“VivaKids” es el título del disco que incluye canciones como “Vamos a jugar”, “En un bosque de la China” o “El piojo y la pulga”, y va acompañado de un DVD con dibujos animados con los que interactúa la mexicana.
“Para mí es importante que no se pierdan estas canciones y que tengan un concepto, un contenido, un cuerpo de trabajo; que no sean solo una canción. Este disco tiene eso, es un viaje al mundo fantástico interior que todos tenemos”, apuntó.
Según contó la cantante, el proyecto comenzó siendo algo privado para sus hijos, Sabrina, de casi siete años, y Mateo, de casi tres, fruto de su matrimonio con el productor musical Tommy Mottola, con quien está casada desde el año 2000.
Ella se las cantaba a los niños y veía que se emocionaban y se interesaban, y por ello decidió hacer algunas maquetas para ellos que acabaron siendo el germen de este trabajo discográfico.
“Este disco es mi travesura máxima y por lo mismo que me divertí con cada canción, me metí en cada personaje,
y por ello me
permitió también actuar, cantar”, dijo la artista, quien aclaró que pese a esta incursión en las canciones infantiles no va a cambiar de género y ya está preparando un nuevo disco.
Además de ese disco, Thalía ya ha incursionado antes en el mundo infantil y el pasado año sacó “Chupi: El Binky que regresó a su hogar”, un libro que es una herramienta pedagógica para ayudar a los padres a enseñar a sus hijos a desprenderse del chupete. EFE
