Flores amarillas, sus favoritas, decoran el velatorio
Los restos del fallecido Premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, son velados en una casa funeraria, ubicada a pocas cuadras donde se ubicaba su domicilio, al sur de la Ciudad de México, donde vivió por varias décadas.
La avenida San Jerónimo, donde se ubica la funeraria Pedregal, se encuentra congestionada de vehicular, debido a la masiva asistencia
de periodistas de el mundo que han llegado para cubrir el deceso del escritor colombiano.
El velatorio está decorado con flores amarillas, las favoritas de “Gabo”, como lo llamaban sus amigos cercanos, incluso se recuerda que lució una flor amarilla en su saco que vistió durante su último encuentro con la prensa en las afueras de su domicilio.
Asimismo, hay un fuerte resguardo policial en la de la casa funeraria, que se ubica al sur de Ciudad de México, para evitar cualquier hecho que altere el orden y tranquilidad del velatorio del escritor que falleció hoy a los 87 años.
La obra más difundida de García Márquez “Cien Años de Soledad” (1967), vendió más de 50 millones de copias y fue traducida a más de
40 idiomas. En 1982, el autor colombiano recibió el premio Nobel de Literatura.
García Márquez es uno de los mejores exponentes de la literatura y deja un legado de obras universales como “El Otoño del Patriarca” (1975), “Crónica de una muerte anunciada” (1981), “El general en su laberinto” (1989), “Del amor
y otros demonios” (1994).