“Todos los transportadores del país estamos de acuerdo en lo perjudicial de este servicio, es que nuestro carros con cupo valen 140 millones de pesos, uno de UBER no pasa de 40 y además ni siquiera pagan impuestos en Bogotá, tienen placas de otros municipios, nosotros mantenemos la idea del paro”.

A su turno, Ernesto Sandoval, representante de los taxistas ante Fenalco, manifestó que no puede haber leyes diferenciales para dos servicios iguales y que lo que se necesita es inversión del Gobierno y el sector privado para capacitar y darles más herramientas a los taxistas para que se preste un mejor servicio.

“Ese decreto sería incoherente, hay 100.000 familias que se verían afectadas solo en Bogotá, sabemos que el servicio tiene algunas falencias y por eso bienvenida la competencia, pero en igualdad de condiciones”, concluyó.