La cubana más internacional de todos los tiempos, Celia Cruz, cumple este miércoles once años de fiesta en el cielo. Su nombre era Úrsula Hilaria Celia Caridad Cruz Alfonso, y destacó por su música tropical, lo que acabó coronándola como ‘La Reina de la Salsa’
Úrsula Hilaria Celia de la Caridad Cruz Alfonso de la Santísima Trinidad, ‘Celia Cruz’, es natural del barro Santo Suárez de La Habana, en donde nació siendo la segunda hija de un fogonero de ferrocarriles y un ama de casa Catalina Alfonso Ramos. Durante su infancia, Celia Cruz, compartió la vida con sus tres hermanos -Dolores, Gladys y Bárbaro- y once primos.
Desde pequeña, Celia Cruz cantaba en todos los rincones de la casa, poniendo música a pequeños y grandes. Más tarde aprendió a bailar, viendo el espectáculo en ventanas y cafés cantantes y, gracias al apoyo de su madre, logró dar el salto a la canción, entrando previamente en el Conservatorio Nacional de Música de Cuba. Todo un premio para una voz clásica y eterna.
Celia Cruz es conocidísima por canciones como ‘La Vida es un Carnaval’, ‘La Negra Tiene Tumbao’ o ‘Quiramba’, todas ellas de las trés últimas décadas del siglo XX. Pero su despertar se produjo con Sonora Matancera, con la que creó obras como ‘Burundanga’, ‘Caramelos’, ‘Yerbero moderno’, ‘Tu voz’, ‘Ritmo tambó y flores’, ‘Pa’ la paloma’, ‘Nuevo ritmo omelenkó’, ‘Vallán vallende’ o ‘La sopa en botella’. Estas últimas obras las tocó en Cuba hasta su salida del país, tras la llegada de la revolución.
Celia Cruz, con su simpatía y su cercanía, puso a varias generaciones a bailar al ritmo de su ”¡Azúcar!”, su grito de guerra con el que conseguía ser plenamente identificada. Y es que pocas artisas en la historia de la música ha habido más singulares y dotadas de una energía peculiar e inimitable como la cubana. Famosas son sus actuaciones plagadas de energía.
Y es que la cantante no descansaba cuando se trataba de subirse a un escenario. Conocía claramente que dependía de sus fans y seguidores alrededor del mundo y por ello se empeñaba, con resultado innegable, en dar lo mejor de sí cada vez que actuaba en directo. Celia Cruz fue sin duda una artista que marcó una forma de entender la música y sobre todo de expresarla, dejando muestras de que la vivía y la amaba por encima de todas las cosas.