La banda delincuencial, que se dedicaba a la venta a domicilio de estupefacientes por medio de niños entre 10 a 11 años de edad, operaba en el centro de la capital colombiana y se valía de menores de edad para evadir a las autoridades.
Los integrantes de la banda escogían a menores incautos para cometer sus actividades ilícitas. El trabajo consistía en que los jóvenes debían entregar cajas en direcciones específicas a cambio de monedas o dulces sin saber que se encontraba dentro de ellas.
La Dijín aseguró luego de las investigaciones realizadas que en las cajas que transportaban los menores de edad se traficaban grandes cantidades de droga que otras personas encargaban a domicilio por medio de llamadas telefónicas o redes sociales.
Entre los capturados se encuentran diez personas que fueron detenidas en un operativo llevado a cabo por la policía, entre ellos están alias ‘Sonia’ y ‘Germán’, desmovilizados de las Autodefensas y quienes coordinaban eltráfico de estupefacientes.
La droga, al parecer, llegaba a las terminales de Bogotá proveniente del departamento del Cauca. En esos puntos también se utilizaban a niños para sacarla y llevarla a los expendios.