La renuncia de Lorena Gutiérrez y la aceptación de su dimisión por el Presidente abrieron el jueves el espacio para una ‘cirugía’ en los círculos de poder más cercanos al mandatario.
Desde Nueva York, donde asistió a la Conferencia de Naciones Unidas sobre el tema de las drogas, el mandatario confirmó que habrá más relevos en su equipo de gobierno.
“Es el inicio de una serie de cambios que hay que hacer en el gabinete ahora que vamos, espero que sea pronto, a firmar la paz”, dijo Santos, luego de admitir que Gutiérrez cumplió su ciclo en palacio.
Desde hace varios meses se ha hablado con insistencia del interés del Presidente de hacer ajustes en posiciones claves del Gobierno, como parte del nuevo entorno para la búsqueda de la paz.
“Varios están renunciando porque estamos haciendo unos cambios”, dijo Santos.
De hecho, el Presidente anticipó su retorno a Bogotá para esta noche (lo tenía previsto para el sábado) con el fin de ponerse al frente de los cambios.
Salida sorpresiva
La renuncia de la ‘superministra’ Gutiérrez sorprendió al propio presidente Santos, quien se enteró de su decisión el miércoles en la noche a través de terceros, tan pronto llegó a Nueva York, hecho que lo contrarió.
Antes de que el Presidente prácticamente le aceptara su renuncia a través de los periodistas, diversos sectores políticos se expresaron en favor de su permanencia en el Gobierno.
“Que María Lorena Gutiérrez reconsidere su salida del Gobierno”, trinó el presidente del Congreso y líder del Partido Liberal, Luis Fernando Velasco.
La bancada del partido de ‘la U’ en el Senado emitió desde antes del mediodía otro mensaje de solidaridad con la dimitente.
“De la manera más atenta le pedimos reconsiderar la renuncia a su cargo como ministra”, dice la comunicación de los senadores de ‘la U’, tras destacar sus condiciones personales y profesionales.
El punto que motivó la renuncia de Gutiérrez al Ministerio de la Presidencia, según dijeron el jueves conocedores del caso, habría sido la inclusión de Néstor Humberto Martínez en la
Gutiérrez organizó un concurso de méritos para escoger la terna que el Presidente enviaría a la Corte Suprema de Justicia para su elección y logró la inscripción de 155 aspirantes, pero al final Santos escogió los tres nombres que se daban por seguros.
Gutiérrez no era partidaria de incluir a Martínez Neira en la terna para fiscal, pues no era de sus afectos desde cuando el ternado ostentaba el cargo al que ella renunció. Pero la ‘superministra’, quien también manejaba parte de las relaciones políticas del Presidente con los partidos y con el gabinete, había cortado la comunicación con algunos de ellos.
Otros cambios
La salida de la ‘superministra’ definitivamente llenó de razones al Presidente para hacer cambios en su equipo de gobierno, como el mismo mandatario lo confirmó.
Además de la dimisión de Gutiérrez, cuando regrese a Bogotá, Santos tendrá esta misma tarde sobre su escritorio la renuncia del ministro de Justicia.
Desde hace dos semanas, los ministros fueron informados del interés de Santos de hacer los cambios y estaban listos a poner sus renuncias protocolarias sobre la mesa, pero el mismo Presidente frenó ese momento, a la espera de tramitar el tema de la terna para fiscal general.
“Es el inicio de una serie de cambios que hay que hacer en el gabinete”, dijo Santos desde Nueva York, refiriéndose a la salida de su ministra de la Presidencia. Los cambios son inminentes.