Tras casi un año de recorrer todo Estados Unidos en campaña, la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump llegan muy igualados a las últimas horas previas a la elección del próximo martes 8 de noviembre, que decidirá quién será el presidente número 45 de la historia del país. El promedio de encuestas da a Clinton un 45,3 por ciento de las intenciones de voto frente a un 42,7 para Trump, según Real Clear Politics.
Ambos candidatos luchan codo a codo en Ohio y Pensilvania, que junto con Míchigan constituyen el antiguo centro industrial de Estados Unidos y son claves en esta elección marcada por el iracundo desencanto de las clases trabajadoras ante la situación actual.
Con su nada sencilla promesa de repatriar las fábricas que se fueron a China y México, Trump espera arrancar algunas victorias en esos estados para pavimentar su camino a la Casa Blanca. Por su parte, Clinton ha intentado romper esquemas incursionando en Arizona, tradicionalmente republicana.
Un sondeo nacional publicado ayer por The Washington Post y ABC muestra avances de Clinton con un 47 por ciento contra un 44 para Trump, con un margen de error +/- 2,5 puntos porcentuales.