Rafael Uribe Noguera, el presunto responsable del crimen de una niña de 7 años en Bogotá, fue trasladado a la cárcel La Picota, y no a La Modelo, como se dijo el martes pasado después de la orden del Juzgado 79 de Control de Garantías.
Según se estableció, en la cárcel La Modelo no había un pabellón en la que se le asegurara a Uribe su integridad y seguridad, por lo que el Inpec decidió recluir al arquitecto en la Unidad de Tratamiento Especial (UTE), o celdas de aislamiento de La Picota.
Según explicaron fuentes del Inpec, en dichas celdas no hay contacto con los patios del penal, y usualmente ese lugar es empleado para recluir a los presos que han incurrido en algún acto de indisciplina, o que no pueden convivir con los demás reclusos.
La Policía Metropolitana de Bogotá hizo efectivo el traslado de Uribe Noguera, desde las celdas de paso del Complejo Judicial de Paloquemao hacía la cárcel, luego de que el indiciado fuera judicializado por los delitos de feminicidio agravado, secuestro simple, acceso carnal violento y tortura, que le fueron imputados por parte de la Fiscalía 121 de la Unidad de Vida.
Este miércoles la Fiscalía 121 de la Unidad de Vida llamó a interrogatorio a Francisco y Catalina Uribe Noguera, hermanos de Rafael Uribe, por el crimen de la menor.
Estas personas fueron citadas porque, al parecer, tuvieron participación en la alteración de la escena del crimen de la menor de edad.
La diligencia se realiza luego de que el ente investigador y Medicina Legal establecieran que aparentemente el cadáver de la niña fue escondido en un baño del apartamento de Noguera, sin embargo, posteriormente dicho cuerpo fue puesto al lado de un jacuzzi, y habría sido lavado con el fin de quitar los rastros de sangre y fluidos.
Igualmente, las autoridades detectaron que el cuerpo de la menor fue regado con aceite de cocina.
Lo que alerta a la Fiscalía es que presuntamente los familiares habrían conocido lo que pasó en el apartamento de Uribe Noguera, y no habrían notificado oportunamente a las autoridades.