La avalancha que arrasó a Mocoa cobró la vida de 254 personas, entre ellos al menos 43 niños, dijo el domingo el presidente Juan Manuel Santos, quien reconoció que las cifras son “desgraciadamente, todavía preliminares”.
“Me informan que desgraciadamente la cifra de muertos subió a 254″, señaló el presidente en su cuenta de Twitter. Tras visitar la zona del desastre, en un mensaje a la Nación, el gobernante informó que entre las víctimas del alud, al menos “43 eran niños. Por todos ellos elevamos nuestras oraciones. A sus familiares enviamos nuestras condolencias y el pésame del país entero”.
Minutos antes, mediante una alocución en televisión, Santos calificó de “tortura china” el balance parcial que han hecho los organismos de rescate sobre la catástrofe. El presidente reiteró sus condolencias a los familiares de las víctimas y envió un pésame a nombre del país para todos los que resultaron damnificados por el paso de la avalancha sobre cerca de 20 barrios de la ciudad. Según anunció, todos los gastos funerarios correrán por cuenta del Gobierno y, como había anunciado horas antes, reiteró una ayuda a cada familia de 18.5 millones de pesos, que les serán entregados a las víctimas a través del Fondo de Solidaridad y Garantía (FOSYGA).
Evidentemente compungido, Santos se comprometió con Mocoa para que, con ayuda de todos los colombianos, se levante del duro golpe que propinó la naturaleza en la madrugada del sábado. “Hemos iniciado desde hoy la labor de planeación y organización de lo que será la reconstrucción y rehabilitación de la ciudad. Vamos a apoyar a las familias para la recuperación y mejora de sus viviendas afectadas. A los que perdieron sus casas, les construiremos unas nuevas, en un sitio de menor riesgo”, manifestó el presidente, quien también anunció que darán un subsidio de arriendo de 250 mil pesos mensuales.
Por su parte, Carlos Valdés, director de Medicina Legal, informó que se han realizado “108 necropsias de los cuales 45 cuerpos han sido identificados y de ellos se han entregado 34 cadáveres”.
Tras expresar nuevamente sus condolencias a la ciudadanía de Mocoa, Valdés les pide “gran calma, consideración y paciencia”, pues 52 funcionarios están haciendo el mayor esfuerzo por identificar los cuerpos. “No queremos que se entreguen cadáveres equivocadamente”.
Médicos, odontólogos, sicólogos, antropólogos y personal técnico adelantan las labores de identificación por medio de dactiloscopia, ya que los reconocimientos visuales solo sirven para hacer una identificación previa, pero “los cadáveres se entregan hasta que Medicina Legal tenga completa identificación”.
Con el fin de agilizar las labores, el lunes viajarán 30 funcionarios para que se pueda “terminar la labor” de identificación de los 248 cadáveres que hasta el momento tienen registrados.
La necropsia medico-legal, que tiene en este momento como único propósito la identificación de los cuerpos, se están haciendo en una morgue alterna, lugar donde están llegando las víctimas que murieron en Mocoa y municipios vecinos.
Por otro lado, el director de Medicina Legal informó que para evitar emergencias sanitarias han dispuesto “que aquellos cadáveres que aún no sean identificados o identificados pero no reclamados sean inhumados”, y pidió colaboración a la gobernadora de Putumayo, Sorrel Aroca, y al alcalde de Mocoa, José Antonio Castro, para que habiliten el lote en donde el Instituto, bajo su responsabilidad, pueda inhumar los cuerpos.