Un avión con 71 pasajeros —67 viajeros y cuatro tripulantes— de la aerolínea bangladesí US Bangla se ha estrellado este lunes mientras realizaba las maniobras de aterrizaje en el aeropuerto de Katmandú, capital de Nepal. Las autoridades policiales han confirmado al menos 49 víctimas mortales —en una versión anterior la policía informó de 50 muertes— y 22 heridos, algunos en estado crítico, que han sido trasladados a varios hospitales de la ciudad. “Cuarenta personas murieron en el lugar y nueve murieron en dos hospitales en Katmandú”, dijo el portavoz policial Manoj Neupane.
El avión provenía de Daca, capital de Bangladés, y ha sufrido el accidente en la ciudad nepalí a las 14.20 hora local. En la aeronave viajaban 37 hombres, 27 mujeres y dos niños de varias nacionalidades (44 pasajeros bangladesíes, 25 nepalíes, una chino y otro maldivo), según ha recogido el diario Kantipur.
“Los que estábamos sentados cerca [de la ventana] pudimos escapar. Nos ayudamos unos a otros antes de que el fuego se expandiera. Pudimos saltar delante del fuego. Oíamos a la gente gritar”, ha relatado Aashish Ranjit, uno de los supervivientes. Ranjit, que sufre cortes en las manos y la cabeza, ha narrado cómo perdió la consciencia tras escuchar un fuerte golpe.
El avión acababa de tomar tierra cuando se ha salido de la pista de aterrizaje hasta derrapar en un campo de fútbol, a 300 metros del aeropuerto, según ha informado el portavoz del Aeropuerto Internacional Tribhuvan (TIA), Prem Nath Thakur. “Estamos tratando de controlar el fuego. La policía y el Ejército están intentando cortar parte del avión para rescatar a más viajeros” , ha declarado el portavoz. La torre de control le pidió al piloto que entrase por el lado sur del aeropuerto — llamado técnicamente como pista 20—, pero el aviador “insistió en tomar tierra por el norte —conocido como pista 02—”, ha explicado el director general del aeropuerto Raj Kumar Chhetri.
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Tras el siniestro, el aeroplano se ha incendiado, por lo que los bomberos han tenido que apagar el fuego antes de rescatar a los viajeros. En algunos vídeos que varios testigos han publicado en las redes sociales puede verse la columna de humo del incendio. Los equipos de rescate del aeropuerto y el Ejército nepalí están trabajando en la zona. “Parecía que había caído una bomba”, ha comentado Kailash Adhikari al diario The New York Times. Adhikari trabaja en el aeropuerto como conductor de una compañía de combustible y ha asegurado que los bomberos han tardado 15 minutos en apagar las llamas.
El primer ministro de Nepal, Khadga Prasad Oli, ha anunciado la creación de una comisión para investigar el siniestro. La compañía aérea US-Bangla ha asegurado que sospecha de que la torre de control del aeropuerto cometiera una negligencia al enviar información errónea a los pilotos.”No estamos haciendo ninguna acusación, sospechamos que podría haber habido negligencia por la parte de Nepal”, ha explicado Imran Asif, director ejecutivo de la aerolínea. Asif ha desvelado que la compañía tiene un extracto de la conversación de Control de Tráfico Aéreo en la que se puede apreciar problemas de comunicación entre el piloto y los controladores.
El aeropuerto ha anunciado la cancelación de todos los vuelos tras el accidente, y aquellos que se dirigían al TIA han sido desviado a otros destinos cercanos, según han explicado fuentes aeroportuarias. El avión era un Bombardier Dash 8, con matrícula S2-AGU, y de 17 años. El avión descendió a una altitud de aeropuerto de 4.400 pies y luego ascendió hasta 6.600 pies antes de intentar aterrizar unos dos minutos más tarde, según ha avanzado la web de seguimiento aéreo Flightradar24.com. La aerolínea es una filial del grupo US-Bangla Group, una compañía estadounidense-bangladesí.