PekÃn, ene. 8.
El lÃder norcoreano Kim Jong Un llegó este martes a PekÃn, en una visita sorpresa a un paÃs aliado, dÃas después de que amenazara con cambiar su actitud respecto a Estados Unidos si se mantenÃan las sanciones en su contra.
Mientras que ya se vislumbra una segunda cumbre con Donald Trump, Kim Jong Un debÃa reunirse con el presidente chino, Xi Jinping, indicaron el martes las agencias de prensa oficiales norcoreana y china.
China es un actor clave en el dossier sensible de los programas nuclear y balÃstico de Corea del Norte, pues el gigante asiático es su principal aliado diplomático y comercial.
El joven lÃder norocoreano podrÃa intentar coordinar su estrategia con Xi Jinping de cara a un eventual encuentro con el presidente estadounidense, después del que mantuvieron en junio de 2018 en Singapur.
Kim Jong Un, acompañado de su esposa, Ri Sol Ju, y de varios dignatarios, partió el lunes de la estación de Pyongyang a bordo de su tren especial, informó la agencia de prensa oficial norcoreana KCNA.
Llegó el martes hacia el mediodÃa a la estación de PekÃn, indicó por su parte la agencia surcoreana Yonhap.
Según esta fuente, fue el presidente chino quien invitó a Kim Jong Un, quien regresará a su paÃs el jueves.
La cuarta visita de Kim Jong Un a China se produce una semana después de que advirtiera a Estados Unidos, en su discurso de Año Nuevo, que podrÃa cambiar de actitud si Washington mantenÃa, pese al acercamiento diplomático operado desde el año pasado, sus sanciones económicas contra Pyongyang.
“Xi y Kim ven interesante coordinar sus posiciones antes de las cumbres Kim-Trump. Esto parece ya una costumbre”, consideró Bonnie Glaser, del Centro para Estudios Estratégicos e Internacionales, un centro de reflexión estadounidense.
“Kim también busca la ayuda de PekÃn para obtener un alivio de las sanciones internacionales”, añadió.
China y Rusia consideran que la ONU deberÃa plantearse levantar esas sanciones. Pero Donald Trump afirmó el domingo que éstas seguirÃan vigentes hasta que no hubiera resultados “muy positivos” sobre la desnuclearización.
Además, la visita de Kim Jong Un coincidió con el segundo dÃa de conversaciones en PekÃn entre negociadores chinos y estadounidenses, que buscan resolver la guerra comercial abierta entre ambas potencias.
“El ‘timing’ no podÃa ser mejor”, señaló Harry Kazianis, del gabinete conservador estadounidense Center for the National Interest.
“Esto muestra que PekÃn, manifiestamente, puede jugar la carta de Corea del Norte si lo considera útil”.
Kim Jong Un viajó tres veces a China el año pasado para reunirse con Xi Jinping.
Esta visita fue el segundo tema importante de China en los telediarios de la tarde, pero los presentadores simplemente leyeron el comunicado publicado por la mañana si mostrar imágenes de la visita.
El dirigente norcoreano accedió al poder a finales de 2011, pero nunca se habÃa reunido con el presidente chino hasta marzo de 2018, pues las relaciones entre Corea del Norte y su principal aliado y protector se habÃan degradado un poco en los últimos años a causa del apoyo de China a las sanciones de la ONU contra Pyongyang.
– Seis ensayos nucleares –
Pero en 2018 se produjo un excepcional acercamiento intercoreano, marcado por tres reuniones entre el lÃder norcoreano y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, y la cumbre histórica con Donald Trump en Singapur.
Esta última se clausuró con una declaración a favor de la “desnuclearización de la penÃnsula”. Sin embargo, desde entonces se han registrado pocos avances y las dos capitales no se muestran de acuerdo en cuanto al significado exacto de esa declaración.
Donald Trump afirmó el domingo que se estaba negociando el lugar del próximo encuentro con Kim Jong Un, aunque evitó mencionar ninguna fecha.
Washington exige que Pyongyang desmantele su arsenal nuclear, pero Corea del Norte rechaza hacer ninguna concesión si Estados Unidos no cede en nada, y reclama garantÃas sobre la seguridad de su régimen.
A lo largo de los años, Pyongyang llevó a acabo seis ensayos nucleares y desarrolló y probó misiles balÃsticos que, según expertos, serÃan capaces de alcanzar el territorio continental de Estados Unidos.