El precio del petróleo se disparó el lunes en Londres tras los ataques del fin de semana contra infraestructuras petroleras en Arabia Saudita, que Washington atribuyó a Irán y tuvieron como resultado reducir a la mitad la producción del primer exportador mundial.
A las 09H30 GMT el barril de Brent del mar del Norte, crudo de referencia en Europa, para entrega en noviembre subía un 9,52% respecto al viernes, a 65,97 dólares en el Intercontinental Exchange (ICE) de Londres. Por su parte, el barril de “light sweet crude” (WTI) para el contrato de octubre ganaba 8,71% a 59,63 dólares en el New York Mercantile Exchange (Nymex).
A la apertura del mercado, el barril se había disparado un 20% en Londres, la mayor alza en una sesión desde la guerra del Golfo en 1991.
En opinión de Ipek Ozkardeskaya, analista del London Capital Group, los ataques con drones del sábado, que causaron incendios en la planta de saudita de Abqaiq, la mayor del mundo dedicada al tratamiento del petróleo, y en la de Jurais, son “la mayor perturbación puntual de la oferta de petróleo de toda la historia”.
“El ataque anuló cerca de la mitad de la producción saudita, es decir un 5% de la producción mundial, poniendo de manifiesto la vulnerabilidad de estas infraestructura a los ataques con drones”, señala Craig Erlam, de la firma de corretaje Oanda.
Las autoridades sauditas anunciaron que no hubo víctimas pero no precisaron cuánto tiempo necesitarán para restablecer plenamente la producción en estas instalaciones. Según los analistas, podrían tardar semanas en volver a la normalidad.
Los precios del petróleo se habían mantenido relativamente bajos en los últimos meses debido a una reservas abundantes y a los temores de que la ralentización económica mundial impactara en la demanda. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) incluso había establecido límites de producción para intentar mantener el nivel de precios.
Pero estos ataques ponen de manifiesto la vulnerabilidad del país con “mayor capacidad de producción mundial”, señala el analista de Barclays Amarpreet Singh, y añaden una prima de riesgo geopolítico a los precios.
(EFE)