A esta hora, se viven momentos cruciales en tres escenarios distintos: la Casa de Nariño, el Senado de la República y el Ministerio de Defensa para definir la suerte de Guillermo Botero, quien, como están las cosas, podría ser el primer jefe de cartera en abandonar su cargo por una moción de censura. Esto, según las cuentas de los sectores de oposición.
Para ellos, tal como lo indican, ya tienen 67 votos para la salida del Ministro, que serían los siguientes:
En el Palacio presidencial se analizan los ecos del debate realizado en la noche de este martes y en la que el Ministro fue duramente cuestionado. Además, se miran estas cifras que podrían cambiar el destino del funcionario.
En el Ministerio de Defensa, Botero y la cúpula militar están también a la expectativa.
En el Senado se hacen cuentas de una hipotética votación que –en el momento de publicar este artículo– se inclina a favor de la salida del funcionario.
En la actualidad, el Senado tiene 108 miembros, pero debe descontarse al profesor Antanas Mockus, quien tiene incapacidad médica hasta finales de noviembre y no estaría en esta votación. Serían 107.
Para la moción de censura se requiere la mayoría simple, lo que significa la mitad más uno de los votos de los presentes en la sesión, la cual debe tener un quorum mínimo de 55 senadores.
Hasta la noche del martes había dudas acerca de que la moción prosperara en el Congreso, básicamente por dos razones. La primera se trata de una medida extrema que usualmente los gobiernos saben capotear y, más aún, cuando está en discusión el cargo de uno de los pesos pesados del gabinete, como es un ministro de Defensa. La segunda, porque en Colombia hasta ahora no ha habido un antecedente así.
Sin embargo, el citante Roy Barreras destapó una situación inédita que es la muerte de varios niños en un campamento de las disidencias de las Farc.
“Esconderle esas muertes a Colombia es razón suficiente para que este Senado lo censure, como estoy seguro de que lo hará por primera vez”, dijo Barreras.
El bombardeo se produjo en agosto pasado en Caquetá. “Usted le escondió a Colombia que ese día bombardeó a niños y murieron siete menores. Usted por qué no le contó a Colombia que había bombardeado niños en ese operativo”, acusó el senador.
Este hecho llevó a una reflexión de varias colectividades que consideraban que la muerte de los niños debió haber sido transmitida al país.
De hecho, a esta hora, los senadores conservadores, quienes inicialmente habían expresado su apoyo al Ministro, empezaron a dudar. La expectativa es enorme porque si uno, varios o la colectividad azul en pleno se fuera por la moción, la suerte del ministro estaría echada.