Viernes, 20 de Septiembre del 2024 
José Julián Buelvas, un médico internista que está en la primera línea de atención a pacientes de COVID-19, recibió sufragios y coronas fúnebres. El presidente Iván Duque pidió a las autoridades hallar a los responsables de estas amenazas.
Indignación generalizado produjo en el país las amenazas de las que fue víctima el médico internista José Julián Buelvas, quien reside en Soledad (Atlántico) y quien se encuentra atendiendo pacientes que están en grave estado por cuenta del nuevo coronavirus. Un sufragio y dos coronas fúnebres (una de ellas enviada a su residencia) llevaron al profesional de la salud a denunciar en redes sociales su situación. Este martes, la Fiscalía General de la Nación anunció que ya investiga el hecho.
Un grupo de investigadores de la Sijin en la Metropolitana de Barranquilla llegó hasta su lugar de residencia para recibir la denunciar formal y así conocer en detalle lo ocurrido. Buelvas le contó a las autoridades que en su lugar de trabajo recibió una corona fúnebre y, tras llegar a su casa, encontró una caja con una nota amenazante. La Fiscalía anunció que se analizarán algunos videos de seguridad y declaraciones de testigos.
“La Fiscalía rechaza ese tipo de actos en contra de la misión médica y reitera su compromiso con la investigación judicial, en este caso particular, para establecer quiénes fueron los responsables de las amenazas”, indicó la entidad. Más temprano, el presidente de la República, Iván Duque, exigió a las autoridades investigar el caso y encontrar a quiénes están detrás de estas amenazas. “Nos indigna y duelen las amenazas a médicos y personas que están salvando vidas en nuestro país en medio del COVID-19. Vamos a identificar y llevar a la justicia a quienes han cometido estos delitos. Es un comportamiento ruin, bajo y la peor expresión de la maldad”, dijo.
Desde la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad cuestionan que la norma no haya sido discutida en esa instancia creada por el Acuerdo de Paz para desmantelar esos grupos. Rechazan que los beneficios se concedan únicamente a cambio de información útil para las Fuerzas Armadas, pero no por aportes a la verdad y justicia para las víctimas.
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“Usted está dejando morir pacientes en la Clínica Adela de Char por una negligencia abrumadora que trae sus raíces de otras clínicas (Paso de la 21). Esa negligencia estoy dispuesta a curarla de una sola manera: quiero, deseo y estoy encantado de meterle una bala en la cabeza (…) a mi amigo le dejó morir a su mamá porque no le dio la gana de atenderla por estar ganando más plata en otra clínica (Asunción)”, señala una carta recibida por Buelvas.
El médico –entre el llanto y con la corona fúnebre en sus brazos– divulgó un video en el que defiende su actuar y niega que de alguna manera sea su intención o la de alguno de sus colegas dejar morir intencionalmente a cualquier paciente. “Es imposible que dejemos morir a alguien, fuimos formados para salvar gente”, dijo. Tras conocerse este hecho, la Alcaldía de Barranquilla y la Policía Metropolitana de dicha ciudad acudieron a la residencia de Buelvas.
“Rechazamos rotundamente las amenazas al médico José Julián Buelvas y brindamos todo el apoyo institucional para investigar y lograr dar con los autores materiales e intelectuales de estos hecho”, dijo el general Ricardo Alarcón Campos. El ministro de Defensa, Carlos Holmes, también indicó que las investigaciones ya están en marcha. “Rechazo amenazas contra médico José Julián Buelvas y contra cualquier integrante del personal de la salud que trabaja y se expone a diario por el bienestar de todos nosotros”.
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