Los centros de entrenamiento y acondicionamiento físico, que comprenden gimnasios, box, estudios funcionales y cualquier local donde se realice ejercicio físico, conocieron los protocolos de bioseguridad para retomar operaciones en la resolución 1313 de del Ministerio de Salud.
En dicho documento se establece, en primer lugar, que su aplicación es tanto para los responsables de dichos establecimientos como también para sus usuarios, con el fin de disminuir el contagio del nuevo coronavirus.
Como en los otros sectores productivos que han retornado a actividades, se parte de las medidas de protección como el permanente lavado de manos, el uso obligatorio y correcto del tapabocas y el distanciamiento físico. Además, se deben fortalecer las acciones de limpieza y desinfección, el manejo de residuos y optimizar la ventilación de los lugares.
Y ya en concreto, los gimnasios deben garantizar, según el protocolo, que al ingreso se haga una desinfección de suelas de zapatos con hipoclorito de sodio al 0,5 % y la toma de la temperatura corporal; diligenciar el cuestionario de detección del riesgo para covid-19 en físico o con la aplicación CoronApp; y no se permitirá el ingreso a personas con enfermedades de riesgo como problemas cardiovasculares, asma, EPOC, obesidad, diabetes, cáncer, tabaquismo o con síntomas respiratorios.
Por otra parte, los usuarios se deben lavar las manos al cambiar de zona y antes de iniciar cada rutina. Para eso, se debe garantizar un área de 12.6 metros cuadrados por usuario (2 metros de radio) y disponer de alcohol al 70 % y toallas desechables para desinfectar las máquinas, así como la disponibilidad de agua, jabón, toallas desechables y alcohol glicerinado mínimo al 60 % tanto para trabajadores como para usuarios.
Es clave, según el protocolo, que ingrese o permanezca solo una persona por cada 10 metros del área. “En ningún caso, dentro del establecimiento se podrá superar las 50 personas por hora entre usuarios, trabajadores y proveedores”, detalla el documento