Piedad Córdoba respondió este miércoles a las acusaciones que hizo uno de sus exasesores. Andrés Vázquez dijo que la candidata al Senado era alias Teodora de las Farc y que se aprovechó de los secuestrados para negociar sus liberaciones y obtener rentas políticas.
“No he cometido delito alguno, por el contrario entregué toda mi carrera política para conquistar la paz y los cambios sociales. No me vengan con el cuento de que soy una mujer que se hace perseguir. Acá hay una política sistemática del régimen”, así inicia la defensa de la candidata al Senado por el Pacto Histórico en un comunicado que se extiende por ocho puntos.
La aspirante al Congreso dijo también que ha sufrido una persecución política durante seis años y que, a pesar de eso, nunca ha podido ser imputada por ningún delito.
Córdoba añadió que la magistrada de la Corte Suprema de Justicia, Cristina Lombana -quien ya abrió investigación preliminar en la sala de instrucción penal donde una de las primeras citadas es Ingrid Betancourt como testigo- tiene un hostigamiento obsesivo en su contra.
Respecto al testigo que la señala de ser alias Teodora de las Farc, Andrés Alberto Vásquez Moreno, la exsenadora liberal dijo que él utilizó su nombre para lucrarse con diversos negocios y que intenta sembrar pruebas contra su familia.
La candidata afirmó que este nuevo señalamiento en el caso de “Farcpolítica” es un “refrito”, porque esas pruebas ya habían sido desestimadas por la Cortes Suprema de Justicia y pidió que los comparecientes de las Farc indiquen ante la JEP si había alguna relación con ese grupo armado.
En el comunicado, Piedad Córdoba también desmiente cualquier relación con el empresario Álex Saab y añade que frente a la captura de su hermano Álvaro Córdoba -señalado por una corte americana por narcotráfico- entregará en los próximos días una entrevista exclusiva para demostrar que su familia carga con el peso de una persecución política.
Fuente: El Colombiano.