La Huella de Carbono

Bogotá, 9 de Junio del 2022.- Está claro que cada vez somos más conscientes de nuestro entorno. Más de dos millones de personas afirman haber empezado a reciclar nuevos residuos durante el confinamiento. Además, la gente usó un 15% más el contenedor del plástico tras el confinamiento por la pandemia. Sin embargo, todavía queda un largo camino por recorrer.

La humanidad ha dejado huellas a su paso. Comer, ir a trabajar, disfrutar de las vacaciones… cada acción tiene un impacto en el medio ambiente. A esto se le llama “huella de carbono”.

En su definición más práctica, la huella de carbono es la cantidad de dióxido de carbono (es decir, CO2) y otros gases de efecto invernadero (también conocidos como GEI) que emitimos como personas, y también incluye las emisiones de empresas, organizaciones e incluso áreas geográficas, productos , o evento. Todo lo que hacemos (absolutamente todo) deja una huella a nuestro alrededor.

Esto sucede a pesar de que las personas se vuelven más conscientes de su impacto en el medio ambiente. Algunos datos sugieren que las personas se han vuelto más respetuosas con el medio ambiente en los últimos años.

En estas circunstancias, es normal preguntarse qué tenemos entre manos para reducir aún más nuestro impacto en el medio ambiente. ¿Qué podemos hacer para reducir nuestra huella de carbono?

¿Cómo reducir la huella de carbono?

Estas son solo algunas de las acciones que podemos empezar a incluir en nuestro día a día para reducir la huella de carbono:

• Compra menos productos: A menudo compramos cosas que no necesitamos. Por eso, lo mejor es tener una conciencia crítica y reflexionar sobre nuestros hábitos de gasto. “¿Realmente lo necesito?” es la pregunta que debemos hacernos antes de realizar cualquier compra.
• Reutilizar: Directamente relacionado con lo anterior, muchas veces es mejor no deshacerse de algo y simplemente darle otra vida. Por ejemplo, algunas prendas se pueden sujetar con alfileres en lugar de tirarlas. Otra opción es encontrar lo que buscas en una tienda de segunda mano. Esto también sucede con muchos objetos. La reutilización también nos permite reducir la cantidad de residuos que generamos.
• Reciclar: Sabemos que esta es una de las acciones que podemos tomar por nuestra cuenta y tener un impacto positivo en las cosas que nos rodean. Cada residuo tiene su lugar: cartón y papel, hasta envases azules; botellas y envases de plástico, envases metálicos y ladrillos, plástico, envases de vidrio, ecologización y otros tipos de residuos comunes (si bien siempre hay casos y excepciones la situación debe ser revisados). El último contenedor es donde se almacenan las mascarillas desechables.
• Consumir de forma responsable: Elegir productos de producción local y sostenible es clave para un consumo responsable. Esto se puede hacer comprando frutas y verduras de temporada, o revisando el proceso de elaboración de determinados productos para comprobar que están elaborados de forma responsable y utilizando materiales reciclados.
• Utiliza bolsas de tela o reutilizables: Además de evitar comprar productos con demasiados envases de plástico, una buena costumbre es utilizar bolsas de tela o reutilizables. Por ejemplo, algunos de ellos se pueden llevar en un bolso o mochila. No ocupan mucho espacio y nos ayudan a no gastar más en bolsas de plástico.
• Muévete de forma sostenible: Priorizar el transporte público y la bicicleta es un buen consejo. En el caso de que tengas que utilizar coche, siempre puedes ver cuáles son más ecológicos.
• Revisar el consumo de electrodomésticos: Actualmente, podemos comprar electrodomésticos de bajo consumo. Por otro lado, otros consejos incluyen usar la secadora lo menos posible, usar el microondas en lugar del horno o controlar la temperatura del agua. Las bombillas LED también ayudan. Otro aspecto a tener en cuenta es la etiqueta de eficiencia energética de los electrodomésticos. Un electrodoméstico eficiente consume mucho menos que otro con una etiqueta baja.
• Ten conciencia en casa: Esto significa, por ejemplo, cerrar el grifo cuando no lo estamos usando o desconectar los dispositivos que no estemos usando (¿por qué las teles y los portátiles están en modo de espera, o si no tenemos un dispositivo móvil conectado, por qué conectar un cargador? ) También acortó el tiempo de la ducha.
• Ten conciencia fuera de casa: Así como nos cuidamos en casa, tenemos que hacerlo afuera. Por ejemplo, en lugar de comprar botellas de plástico, podemos llevar con nosotros una botella de agua reutilizable; o termos para otro tipo de bebidas. Pensemos qué productos podemos llevar de casa para no gastar innecesariamente.
• Conciencia al resto: No dudes en difundir estas ideas en tu entorno para que poco a poco cambiemos nuestros hábitos y seamos más eficientes y sostenibles con el mundo que nos rodea. Porque el cambio empieza por nosotros mismos.