Una de las problemáticas de salud más significativas en la actualidad es la de los vapeadores o cigarrillos electrónicos, una moda que apareció como “otra alternativa” para la industria tabacalera.
Algunos de los estragos en la salud que pueden causar estos dispositivos electrónicos son todavía desconocidos, sin embargo, gracias a distintas investigaciones se ha relacionado el vapeo con ciertas enfermedades como el cáncer.
Esta vez, un estudio publicado en Preventive Medicine demostró que los adolescentes que vapean tienen más riesgo de tener asma.Los investigadores advierten que aunque estos tienen menos toxinas que los cigarrillos convencionales, aún contienen mezcla de químicos perjudiciales y aumentan el riesgo de enfermedades respiratorias.
“Aumentar el conocimiento sobre los efectos nocivos del uso de cigarrillos electrónicos, implementar regulaciones más estrictas y promover mecanismos alternativos para enfrentar la salud mental son intervenciones potenciales para mitigar el uso de cigarrillos electrónicos”, dijo el autor principal, Taehyun Roh, de la Universidad Texas A&M, en un comunicado de prensa de la escuela.
El asma puede causar sibilancias, dificultad para respirar, opresión en el pecho y tos. Puede ser controlada con medicamentos y evitando desencadenantes de un ataque, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. El estudio usó datos del Sistema de Vigilancia de Comportamientos de Riesgo en la Juventud, Youth Risk Behavior Surveillance System, una encuesta de los CDC.
El equipo entrevistó a unos 3.000 adolescentes en Texas de 13 a 17 años entre 2015 y 2019 y compararon los resultados con las respuestas de más de 32.000 adolescentes en Estados Unidos. Las preguntas fueron si alguna vez habían usado un cigarrillo electrónico, con qué frecuencia vapeaban y si alguna vez habían sido diagnosticados con asma.
Los investigadores encontraron una relación entre aquellos que nunca habían fumado productos de tabaco convencionales, pero sí cigarrillos electrónicos, con el asma. Sin embargo, el estudio no comprobó una relación directa de causa y efecto.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, aseguró que los cigarrillos electrónicos y los vapeadores “tienen que ser regulados”, ya que “son una trampa” y ha insistido a los Estados miembros que hagan “todo lo posible para proteger a sus ciudadanos”.