En líneas generales, parece que ha quedado impune, aunque ha tenido sus consecuencia. Además de las condenas de distintas asociaciones católicas, se ha encontrado con un problema económico que no esperaban. La empresa de telecomunicaciones C Spire ha decidido retirar su publicidad de los Juegos Olímpicos de 2024 en París.
«Nos ha conmocionado la burla de La última cena durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París. C Spire retirará su publicidad de los Juegos Olímpicos», anunció la empresa en sus redes sociales. Un gesto que ha sido aplaudido por muchos, incluido el gobernador de Misisipi (de donde es la empresa), Tate Reeves.
Además, Suzy Hays, directora general de la empresa, declaró en un comunicado que aunque la compañía apoya a los atletas que han trabajado tan duro para formar parte de los Juegos, «no formaremos parte de la ofensiva e inaceptable burla de La última cena».
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#Parísnomerepresenta
#NOALASOFENSASRELIGIOSAS
#Paishaylimites
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Fuente: El Debate, Y.O.G.O.