Lunes, 30 de Septiembre del 2024
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“No me gusta el parqués”: resultado de una coproducción entre artistas inmersos en las artes escénicas y una sala (CASA TEA) que es ventana de exhibición permanentemente para las artes vivas.

Publicado el 30/09/24

Bogotá, 30 de Setiembre del 2024, CASA TEA sigue siendo una ventana de exhibición viva para las artes escénicas, fomentando la divulgación, promoción, circulación y resistencia de grupos sin sala.  

CASA TEA se mantiene en una lucha constante por mantener una programación nutrida y diversa que fomente el correcto divertimento de todo tipo de público que se acerque a la sala. También cuenta con procesos de formación y creación dónde los resultados han sido satisfactorios, tanto para los participantes como para los asistentes.

En esta oportunidad se le abrieron las puertas de una manera permanente a un grupo de artistas, para poder avanzar y terminar su proyecto teatral con una obra llamada “No Me Gusta El Parqués”; El espacio siempre estuvo abierto para que lograran tener los ensayos necesarios para finalizar la obra y poder presentar su gran resultado este 3, 4 y 5 de octubre del 2024 en CASA TEA.

A Teatro Estudio Alcaraván y su sede CASA TEA le importa el trabajo creativo de la nueva generación de artistas escénicos e intenta hacer todo lo posible para impulsar los diferentes proyectos de quienes están iniciando su camino en la construcción y escritura de nuevas obras teatrales.

Valentina Bernal, directora y dramaturga de la obra nos responde entusiasmada algunas preguntas sobre “No me gusta el parqués”:

¿Cómo surge la inspiración para el desarrollo de esta obra, de este proyecto actual?

“Este es un proyecto de creación producto de la maestría en creación y dirección escénica de la universidad del valle, el cual ha sido un lugar que nos ha permitido explorar, crear investigar, pero sobre todo encontrar un lugar de enunciación frente a estéticas, técnicas, e incluso la misma escena; este proyecto de creación es detonado inicialmente por un par de preguntas en relación a la idea de lo que es el color, preguntas cómo ¿De qué color soy yo?, ¿De qué color son otros?, ¿Por qué estos colores?, ¿Qué me hacen sentir estos colores?, y por supuesto también cómo la idea del color influye en la música, en la plástica, hasta en la misma creación de un personaje, entonces creo que ahondando un poco más, nos vamos hacia la teoría del color y damos mucho más sentido a lo que propone el proyecto.

El parqués cómo juego fue un hallazgo dentro de las exploraciones y las distintas improvisaciones, si bien el parques viene de muy lejos también es un juego de mesa que hemos ido apropiando desde este territorio que es Colombia y como en diferentes espacios, ciudades y contextos el juego ha cobrado unas dinámicas sociales dentro de estos espacios, dentro de estos lugares.

El parqués no se puede jugar si no sabemos de qué ficha son los colores, entonces nuevamente conectamos con la idea del color, con la idea transversal del proyecto y sin duda el juego nos moviliza y nos pone en otros lugares donde la misma acción de jugar ya es dramática y salen a relucir un montón de cosas en medio del juego que para la escena han sido muy acertadas”

¿Cuáles han sido los retos más grandes que has tenido en esta creación/producción?

“Uno de los retos más grandes de este proceso de creación creo que ha sido entender, apropiar y disfrutar de la naturaleza que nos ha propuesto el juego del parqués como dispositivo escénico, como dispositivo teatral en la misma obra puesto que el juego está mediado por el azar, por lo inesperado, por la emocionalidad de lo que va sucediendo allí en ese mismo presente y adoptar eso a la escena.

Cuando nosotros trabajamos con muchas marcaciones y con muchas cosas partiturizadas, pues ha sido todo un reto encontrar el punto medio y entender cómo el material también va hablando por sí solo y esos puntos de convergencia son muy interesantes en la medida que uno potencia al otro al encontrar la chispa del mismo juego y luego poder poner esa chispa en la misma escena sin perder su esencia y con una marcación de por medio; creo que ha sido toda una travesía muy interesante pero también muy retadora, eso por el lado de la creación. Por el lado de la producción creo que el mayor reto ha sido entender que debemos consolidar un equipo capaz de entender cuál es la ruta de trabajo, las tareas, y sin duda, que todas y cada una de las áreas tenga algo por decir dentro del mismo proceso para poder generar un sentido de pertenencia, una vinculación directa y que también sea un proceso de todos y para todos.”

¿Cómo joven directora y dramaturga que mensaje le darías a las mujeres que están empezando este camino enfocado en estos dos lenguajes de las artes escénicas?

“Bueno y a las nuevas generaciones a las nuevas directoras y dramaturgas que tomamos la decisión de aventurarnos en este oficio tan retador, creo que solo podría decir que tomemos riego, que no le temamos al riego, que no le temamos al fracaso que los procesos de creación están ahí vivos para poder explorar, poder jugar, poder hacernos mil y un preguntas sin prejuicios, permitiéndole también a los materiales hablarnos con una sensibilidad absoluta, a no imponer nuestra fuerza, a no imponer nuestra idea, a no imponer nuestras percepción, si no caminar con el mismo material, caminar con el mismo proceso, caminar con el mismo equipo y escuchar;  la creación es muy impredecible pero sobre todo es muy amable cuando nos dejamos llevar, nos dejamos guiar por lo que allí está en juego, por lo que allí está puesto y abrir, abrir mucho los oídos,  los ojos, todos los sentidos, para que la creación sea un lugar divertido, tranquilo, retador, interesante, cuestionable pero sobre todo para que nos dé un sentido en nuestro que hacer y nos reafirme como investigadoras, creadoras y artistas.”

“NO ME GUSTA EL PARQUÉS”

SINOPSIS:

Es una obra teatral que nos invita a colarnos, soplar o pisar en la vida de Antonio, un viejo pintor al que un suceso le destiñó la vida. Terco y entrañable, trata de darle sentido con pinceladas a blanco y negro, mientras su hija Violeta quien lleva años intentando descifrar los misterios de su papá lanza sus propios dados en esta partida de secretos. Con cada jugada, todos pasaremos por un tablero lleno de luces, sombras, retratos y fantasmas, donde la verdad se esconde entre un teléfono que nunca deja de sonar, lugares agrietados sin fondo, y cuatro dados que deciden si las respuestas finalmente llegarán.

Esta obra es un juego de contrastes, de emociones, de un padre e hija que intentan encontrar los colores que la vida les robó, o ellos extraviaron.

¿Te animas a jugar?

Dirección Y Dramaturgia:

Valentina Bernal

Actuación:

Katherine Gregory

David Bojacá

Sala: CASA TEA (Calle 19 # 4 – 71 Local 405)

Fechas: 3, 4 y 5 de octubre

Hora: 7:30pm

(El sábado 5 habrá una función de 5:30pm)

Boletería: General: $30.000/ Estudiantes: $25.000

La cita es en la calle 19 # 4 – 71 Local 405 CASA TEA, Centro Comercial Los Ángeles 3, 4 y 5 de octubre 2024 a las 7:30pm; (El sábado habrá una función de 5:30pm). Boletería: General: $30.000/ Estudiantes: $25.00



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