Lima, 28 de Enero del 2025.- El crecimiento exponencial de la inteligencia artificial (IA) está desencadenando un aumento sin precedentes en la demanda energética global. En Estados Unidos, los centros de datos dedicados a esta tecnología podrían consumir más electricidad que países enteros como España, Italia o Reino Unido en los próximos tres años. Las previsiones del Departamento de Energía de EE. UU. (DOE) indican que, para 2028, el consumo energético de estos centros alcanzará cifras récord, planteando serios desafíos para la infraestructura eléctrica del país. Mientras la industria tecnológica busca soluciones sostenibles, como la energía nuclear, expertos advierten que la velocidad de expansión de los centros de datos podría superar la capacidad de respuesta de la red eléctrica estadounidense.
Según las estimaciones oficiales, el consumo energético de los centros de datos destinados a la IA en Estados Unidos alcanzará los 325 teravatios hora (TWh) en 2028. Esta cifra representa un incremento significativo en comparación con años anteriores y equivale a más de lo que consumen anualmente países como España (246 TWh), Reino Unido (287 TWh) o Italia (298 TWh). De hecho, se espera que la IA represente entre el 6,7% y el 12% del consumo total de electricidad en el país norteamericano.
Este aumento en la demanda está impulsado por la creciente adopción de modelos de IA generativa, que requieren una enorme capacidad computacional para operar de manera eficiente.
Expertos advierten que la infraestructura energética de Estados Unidos no está preparada para absorber el rápido crecimiento de la demanda de los centros de datos de IA. Actualmente, se estima que el país necesitará una potencia instalada de entre 74 y 132 gigavatios (GW) para abastecer estas instalaciones, lo que supera la capacidad de generación eléctrica total de España, que en 2023 se situó en 125,6 GW.
La falta de planificación adecuada podría generar tensiones en la red eléctrica, y algunas voces de la industria, como la del director de OpenAI, Sam Altman, han advertido que la IA podría desencadenar una crisis energética sin precedentes si no se toman medidas drásticas de eficiencia y abastecimiento.
Ante el creciente reto energético, las principales empresas tecnológicas están explorando diferentes fuentes de energía para garantizar un suministro estable y sostenible. Una de las soluciones más consideradas es la energía nuclear, especialmente a través de pequeños reactores modulares (SMR), que ofrecen una producción energética constante y con menor impacto ambiental.
Empresas como Microsoft, Google y Amazon ya han cerrado acuerdos para el desarrollo de proyectos de energía nuclear con el fin de alimentar sus centros de datos. La reactivación de plantas como Three Mile Island en Pensilvania y las colaboraciones con startups especializadas en reactores modulares son algunos de los esfuerzos en curso para afrontar este desafío energético.
El auge de los centros de datos de IA no solo plantea desafíos energéticos, sino también preocupaciones ambientales. Además del alto consumo eléctrico, estos centros requieren grandes cantidades de agua para los sistemas de refrigeración de los procesadores. En 2023, los centros de datos de EE. UU. utilizaron alrededor de 66.000 millones de litros de agua, y se estima que esta cifra podría alcanzar los 124.000 millones de litros en 2028.
La dependencia de fuentes de energía tradicionales, como el carbón y el gas natural, podría aumentar las emisiones de carbono si no se adoptan estrategias de transición hacia fuentes renovables o nucleares. Los expertos instan a implementar políticas de eficiencia energética para mitigar el impacto ambiental de la IA.
Fuente: papernest.es